lunes, 14 de enero de 2013

Demasiado extraño.

Siempre tendemos a llorar por lo perdido, a extrañarlo más por haberse ido que por haberlo poseído. Está claro que nunca aprendemos, que no estamos preparados, que no queremos dejar el pasado a un lado pero, ¿es razón de decirle 'no' al destino? ¿Es necesario encerrarnos en la loca ignorancia? No lo sé, pues yo sigo enamorado del recuerdo que me trae esto pero sí sé que nunca volverá, que acabó y nada más. Pero también sé que algo, si tiene final, si de verdad se acaba, es que claramente valió la pena, que hubo un sentimiento, no duradero, pero sí importante, como yo en estos momentos, que por mucho que me duela, debo decir adiós y seguir adelante. Que debo mirar hacia delante e ir con esperanza, que tras cada noche que pase, por mucho que no quiera, ese bonito recuerdo se quedó con la primera palabra de esto que escribo, en un bonito pero antiguo siempre.

domingo, 6 de enero de 2013

Renuncio.


Con el cambio de año, muchos piden cosas como videojuegos, ropa y cosas así. Yo es que nunca y menos desde pequeño pedía cosas a mogollón como normalmente se esperaba, sinceramente, el espíritu de la Navidad nunca cuajó en una familia con una madre cristiana y un padre ateo.
Aunque claro, estas fiestas han sido distintas. Sí, he crecido y tengo algún que otro capricho pero ahora bien, el único deseo realmente importante es que, entre la gente que más quiero, una de ellas que lo ha pasado mal, se ponga mejor y sonría. Que consiga ser feliz, que, aunque no la pueda volver a ver en la vida estando lejos de ella, pueda ser feliz.
Me conformo con eso, sólo con eso y yo ya podré morir en paz.

viernes, 4 de enero de 2013

Al fin y al cabo soy yo, y no los demás.

Si mal no recuerdo, a los seis años de mi existencia, nos mudamos mi familia y yo. Antes de eso, hubo mucho pero apenas retengo esas cosas. Lo que sí tengo en mente, es la casa de mis abuelos, dos pisos y en una urbanización donde yo era el rey. Jo, ¡qué tiempos aquellos! La verdad, es que echo mucho de menos no hacer nada, ser un niño sin conciencia de lo bueno y lo malo, a veces me pregunto por qué me fui de un lugar así donde el mal no existía.
En estos días, mis padres quieren volver, sea juntos o separados, quieren tener un hogar allí y les entiendo, su vida y sus amigos están lejos pero no es mi sitio. Cuando me enteré de que podía no haberme quedado en España, me mató la idea porque, puede que allí las cosas estén mejor, puede que haya un futuro mejor pero no es el mío. Lo sé. Suena muy egoísta por mi parte pero mi vida está aquí y sé que ante todo, va uno mismo y la felicidad que tenga en su interior. Es por eso que nunca podré tener una vida en paz lejos de aquí porque esto es mi hogar y sí, no pasa día que no me maldiga al vivir en esta ciudad y sé que algún día yo también me iré, pero hasta entonces, lo que quiero y necesito, se encuentra aquí, aunque sea un trozo pero es aquí donde deseo estar.

La verdad es que un poco friki, sí que soy.

Desde pequeño, siempre hubo una marca que me diferenciaba de los demás niños. Por ejemplo, muchos veían de ligarse a chicas más mayores, o estaban todo el día hablando de fútbol (cosa que me gusta, pero no soy un fanático) y después estaba yo. El niño rarito que jugaba a la consola todo el día, era llegar a casa, descansar, acabar los deberes y buscarme algo que hacer. No sé. Algo productivo. Por ejemplo... Espera que piense... Ah, sí. Dibujar.
Mientras muchos críos de mi edad hacían cuerpos amorfos, yo destaqué siempre por ir un paso adelante, después lo dejé por razones que ni yo mismo sé.
También está el coleccionar tazos, cromos o figuritas de personajes con los que me había educado.
Otra cosa de estas sería seguir de cerca series o películas que tuviesen algo de chispa, que más allá de una estética en la que yo me fijase, hubiera un sentido donde poder aprender. (Pokémon, Digimon, alguna serie de Anime como Megaman o Keroro pero sin olvidar sagas como Regreso al futuro, Star Wars, Los Simpsons y mucho más)
Por último, la música. Esa gran y jodida amiga que nos ayuda cada día a millones de personas en el mundo. Creo recordar que una vez, en la primaria, nos preguntaron sobre gustos musicales y todos soltaron ''Reggaeton'' o Flamenco, yo nunca había tenido interés en eso. No sé. Nunca me ha gustado y no creo que llegue el día en que me veáis con esas cosas. Yo siempre fui de Rock, Heavy, BSO's y alguna que otra canción Pop por lo que, mayoritariamente se basaban en cantantes o bandas ya retiradas, vamos, lo que escuchaban nuestros padres.
Estas fueron las razones por las que, muchas veces me llamaban rarito aunque a decir verdad, ¿quién es más rarito? ¿Una persona que intenta buscarse a sí misma en lo que le atrae y le gusta, o bien una panda de niñatos que intentan hacerse los chulos creyéndose algo por el hecho de escuchar o tener algo aquello que está de ''moda''?

¿Quién me lo impide?

¡Hola!
Bueno, supongo que, para quién lea esto, le parecerá aburrido y de hecho, son las 5:27 de la mañana  así que ni yo mismo sé qué hago despierto. No he dormido nada así que puede que desvaríe pero por otro lado, ¿quién me lo impide?
Yendo al grano, soy alguien cualquiera, alguien que pasa desapercibido, alguien completamente normal y como los demás pero, ¿quién me impide cambiar un poquito? Siempre me ha costado destacar y de hecho, creo que esto será una ayuda. Por ello, he comenzado un nuevo Blog. Me desharé de los demás en cuanto pueda. Quién lea esto, pensará que estoy desvariando o yendo en mal camino pero, ¿quién me impide probar de lo que de verdad soy capaz?